Podría devorarte, mientras me devoras tú, podría desobedecer los limites de mi piel, hacer de ti mi propio ser, quererte tal como ayer como aire fresco.
Pero es que no siento nada...
de cuando me asfixiabas ya tan sólo quedo yo, con mis defectos ellos todos los que tu voz acobardó con el porque del que acobarda una flor...así...así...
Así lloré de madrugada, así...así...así lloré como las hadas encerradas.
Descosiste nuestras almas, descosiste el Amor que bordamos los dos, te di todo y mas...mejor te vas!
Descosiste nuestras almas, descosiste a dolores, a lagrimas de cobre, a soledad...te di, tu mitad...mejor te vas!
Porque es que no siento nada...podría olvidarte de nuevo, y volver a empezar, pero es que ya no siento deseos de volverte a tocar, ni de saber si vas, o vienes, eso ya me da igual...
Tanta paz te lleves... tanta paz te lleves como dejas.
Descosiste nuestras almas, con la furia de un dios con total perfección...descosiste nuestras almas con las uñas afiladas...olvídate! Mejor te vas!
DIEGO MARTÍN.
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